Hace varios años, la población mexicana veía con desprecio y temor a las personas que presumían tatuajes en su piel, la ignorancia, y costumbres de una sociedad ultra conservadora con alta carga de doble moral, tachaban con un sinfín de adjetivos despectivos a los que portaban un diseño en alguna parte del cuerpo.

Los tiempos han cambiado "se supone" y pasó de considerarse como marcas de reclusos y delincuentes a una expresión artística. La antropología nos presenta que desde tiempos prehispánicos, el hombre marcaba su cuerpo según las formas simbólicas que marcaban su contexto. Hasta la fecha sigue con esta usanza. Al son de la calle se fue a la Expo Tatuaje 2013. Donde locales reconocidos, artistas nacionales y extranjeros se dieron cita para mostrar su trabajo, realizar sesiones y asesorarte por si te gustaba algún dibujo o querías concertar una cita. Y entre tinta, el sonido característico de las máquinas y personas luciendo tatuajes se llevó con éxito la exposición. ¿Ustedes tienen algún tatuaje? ¿Quieren hacerse uno?